Murmuro "Buenas noches amor mío" y mis palabras viajan de mi psique hasta tu oído y una sonrisa se dibuja en tus labios entre la consciencia y el sueño.
Te llamo con el pensamiento y apareces. Vienes a mi cuando más necesito tu presencia, no sé si es sin darte cuenta, o como respuesta inmediata a mi urgencia de ti, al llamado de mi alma.
Llegas a mis sueños y me amas, tan intenso, tan vívido que ignoro si es real o producto de mi mente. Te escucho, te siento, percibo tu aroma, te vivo.
Llego a ti de repente, mis palabras se enredan en tus dedos y se pasean por todo tu cuerpo hasta anidar en tu corazón. Y digo: "si, soy yo corazón. Buenos días".
Robas las palabras de mis labios, haces tuyos mis pensamientos de tal suerte que no estoy segura si fui yo o fuiste tú quien los tuvo primero.
Quizás sea que nuestras mentes se comunican de alguna forma. O simplemente que nuestras almas se conocieron en la eternidad y se buscaron hasta encontrarse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario